Riult Rivera presume alianza con el polémico exgobernador Mario Anguiano, envuelto en escándalos de corrupción por más de 638 millones de pesos
El candidato a la alcaldía de Colima enfrenta cuestionamientos por recibir el apoyo de un político inhabilitado por 14 años y multado con más de 515 millones de pesos por casos de corrupción.
La controversia ha estallado en la campaña por la alcaldía de Colima después de que el candidato Riult Rivera compartiera en sus redes sociales un video donde recibe el respaldo de Mario Anguiano, exgobernador del estado. Esta alianza ha levantado serias dudas sobre el criterio y la integridad de Rivera, dado el turbulento historial de Anguiano, plagado de irregularidades y acusaciones de corrupción.
Durante el gobierno de Mario Anguiano, Colima se vio sumido en una profunda crisis financiera y administrativa. Las protestas por falta de pago a los trabajadores y los despidos masivos se convirtieron en el telón de fondo de una administración marcada por el déficit y la controversia. La situación era tan grave que Ignacio Peralta, sucesor de Anguiano, calificó el estado en que recibió el gobierno como «caótico» y afirmó que se había pasado «de la angustia a la esperanza» durante sus primeros meses en el cargo.
El informe resultante, conocido como «libro blanco», sacó a la luz un catálogo de irregularidades y posibles actos de corrupción durante la gestión de Anguiano. Entre los hallazgos más alarmantes se encuentran:
- Entrega de contratos a empresas ligadas a exfuncionarios y allegados.
- Adquisiciones a sobreprecio y contratación de créditos por 638 millones de pesos destinados a gasto corriente.
- Existencia de empresas «fantasma» y proveedores que eran funcionarios públicos.
- Transferencias millonarias a cuentas bancarias no registradas en la contabilidad oficial.
- Compra simulada de un bien inmueble con recursos de la deuda pública.
Las consecuencias fueron severas para Anguiano y su equipo. El Congreso local decretó inhabilitaciones administrativas para varios exfuncionarios, y el propio Anguiano fue inhabilitado por 14 años y recibió sanciones económicas por más de 515 millones de pesos. Además, se ordenó denunciarlo penalmente por posibles delitos relacionados con el manejo irregular de la deuda pública.
En este contexto, el respaldo de Anguiano a Riult Rivera genera serias preocupaciones sobre el tipo de gobierno que el candidato pretende encabezar. ¿Por qué Rivera buscaría asociarse con un político con un pasado tan cuestionable, inhabilitado y multado por actos de corrupción? ¿Acaso comparte los mismos valores y prácticas que llevaron a Colima a una crisis financiera y administrativa?
Además, el hecho de que Anguiano también haya manifestado su apoyo a Xóchitl Gálvez, candidata a la presidencia de la República por la coalición opositora, sugiere que sus lealtades políticas son volátiles y oportunistas. ¿Qué garantía tiene la ciudadanía de que Riult Rivera no seguirá los pasos de su nuevo aliado y anteponga intereses personales a los de la población?
Es preocupante que un candidato que aspira a gobernar la capital del estado se rodee de figuras controvertidas y se beneficie de su respaldo. Los colimenses merecen líderes íntegros, transparentes y comprometidos con el bienestar común, no políticos dispuestos a pactar con personajes cuestionables para alcanzar el poder.
La alianza entre Riult Rivera y Mario Anguiano, un exgobernador inhabilitado por 14 años y multado con más de 515 millones de pesos por actos de corrupción, parece ver lo que representa su proyecto político.