Películas para celebrar el Día Mundial del Agua (I de III)
Por: Vladimir Parra
Columna: Estación Esperanza
“El cine es una fuente riquísima de información y de cultura, que permite entrar realmente en el estudio de nuestra sociedad y en el de otras realidades culturales cercanas o lejanas“
-Eric Hobswan 2002
El pasado viernes 22 de marzo celebramos el Día Mundial del Agua, por lo que, en dicho contexto, es importante resaltar el valor de este recurso, los servicios que proporciona y la importancia de su cuidado para involucrar a más personas. Esto implica utilizar todas las herramientas disponibles, con el fin de fomentar valores, actitudes, costumbres y hábitos que permitan crear una conciencia responsable sobre su uso.
Ante ello, los recursos narrativos, sean ficciones o documentales, se vuelven esenciales para dar a conocer problemáticas, para propiciar cambios positivos y voluntarios en las personas, a traves de un ejercicio de inmersión a nuevas visiones, contextos e incluso realidades que no teniamos previstos, y en ese sentido, el cine resulta una experiencia absorbente que permite reflexionar en corto tiempo problemáticas complejas.
Es por ello, que comparto esta pequeña selección de películas que de manera directa o indirecta, abordan la temática del agua y permiten hacer una reflexión, de a una película por semana.
- El niño que domó el viento / 2019
Si el cine nos acerca a nuevos contextos y realidades culturales, esta película es un gran ejemplo pues retrata la gran crisis alimentaria de África a mediados del año 2001 y el sistema político de Elson Bakili Muluzi, Presidente de Malaui de 1994 a 2004. La historia se centra en William Kamkwamba, un estudiante que tiene la capacidad de reparar radios por lo que en su tiempo libre busca componentes electrónicos entre la chatarra.
Es gracias a su empeño que William aprende solo, a través de la lectura, sobre ingeniería eléctrica y producción de energía; y con tan sólo 14 años desmantela la biciccleta familiar, con la que construye un molino de viento que dota de electricidad al pueblo, lo que permite bombear el agua necesaria para los cultivos de la comunidad que sufría de sequía y hambruna.
Un film con una gran reflexión sobre la importacia de los intereses públicos por sobre los privados y de la teconología, que aunque en muchos casos ha destruido la cultura tradicional del continente africano, también ha permitido seguir escribiéndola gracias a la unión, creatividad y voluntad de su pueblo.
Te invito a seguir las siguientes emisiones de esta columna, donde charlaremos de la saga, Duna de escrita por Frank Herbert. ¡Hasta entonces!