“Amor es Amor”: Centros de Reinserción Social de Colima.

Por: Linda Illanes

En un evento trascendental e histórico para el Sistema Penitenciario Estatal, se llevó a cabo la semana cultural “Amor es Amor” en celebración del 28 de junio Día Internacional Orgullo LGBTTTIQ+ al interior de los Centros de Reinserción Social Varonil y Femenil del municipio de Colima, en la que participamos actores sociales, funcionarios, servidores públicos, por supuesto las autoridades penitenciarias y la comunidad de la diversidad privada de la libertad.

Esta semana de actividades incluyó la presentación de 2 muros nombrados “Paradoja arcoíris”, uno de ellos realizado por el artista colimense Rafa Bimer en colaboración con la población penitenciaria de la comunidad del Centro Varonil; y en del Centro Femenil realizado por las mismas personas privadas de la libertad.

En estas obras se pudo apreciar la búsqueda de la libertad, la dignidad y la felicidad, expresadas a través de una puerta abierta que deja salir un arcoíris inmenso, acompañado de mariposas de colores que salen de sus capullos.

También se realizó la primera marcha al interior del centro justo el día 28 de junio, y finalmente se clausuró la semana con un divertido y bonito Show Drag interpretado por las personas privadas de la libertad.

Es importante señalar que el libre desarrollo de la personalidad, la orientación sexual, la dignidad, la no discriminación, son derechos humanos indispensables para todas las personas, y los Estados, a través de sus Sistemas Penitenciarios, están obligados a salvaguardarlos y garantizarlos a favor de las personas que tienen bajo custodia.

Después de casi 95 años de abandono y marginación, la administración actual de nuestro Estado ha sido pionera en la crítica, reflexión y transformación del funcionamiento del Sistema Penitenciario local, que se ha visto reflejada en una mayor gobernabilidad y seguridad al interior, mayor inversión en las condiciones de seguridad, y estancias en las que residen los internos, más actividades educativas, culturales, deportivas y familiares, así como una serie de iniciativas que han sido analizadas y aprobadas por el Congreso Estatal, constituyendo un trabajo colaborativo en la búsqueda de la construcción de la seguridad y la paz de nuestra Entidad.

Como sociedad muchas veces juzgamos y rechazamos lo diferente, lo atrevido, lo irreverente, pero son precisamente esos movimientos, esas disidencias las que abren el camino para lograr sociedades más democráticas e igualitarias.

En este evento histórico se visibilizaron los derechos, no solo de la comunidad LGBTTTIQ+, sino también los de la población privada de la libertad, que por mucho tiempo ha sobrevivido a violaciones sistemáticas de derechos humanos, porque aún, desafortunadamente, es necesario explicar y recalcar que a pesar de haber cometido delitos, conservan sus derechos humanos básicos.

También debemos reflexionar sobre el origen de las conductas antisociales, si se deben quizás a la falta de oportunidades, a la discriminación, a entornos familiares violentos, a la falta de empatía y solidaridad a las que a veces nos enfrentamos.

Tenemos que seguir replanteándonos ¿para qué sirve el Sistema Penitenciario? ¿cuál es la finalidad de la Reinserción Social? y ¿cómo garantizarla? para continuar en la construcción de leyes y  Centros más seguros, igualitarios y garantes, que permitan a las personas privadas de la libertad la proyección de una vida digna, y una efectiva reinserción social que termine con la reincidencia delictiva.

Este significativo evento ha sido un paso más en el reconocimiento de los derechos humanos de las personas privadas de la libertad, en hora buena por la Transformación del Sistema Estatal Penitenciario.