1° de mayo, un día para celebrar

Por Mildred Silva*

El 1° de mayo es un día para celebrar y conmemorar a los trabajadores, su origen proviene de los años 1886 en la Ciudad de Chicago donde un grupo de trabajadores pedían reducir las jornadas laborales a 8 horas puesto que habitualmente trabajaban en promedio 16 horas continuas. El 1° de mayo no debe de pasar desapercibido, debe de recordarnos a todos aquellos mártires de la huelga que fueron encarcelados y fusilados tiempo después, destacando que en esos tiempos Chicago era la segunda ciudad más grande en Estados Unidos y las condiciones de trabajo resultaban ser pésima para los obreros.

Tuvieron que pasar alrededor de tres años para que finalmente en el año de 1889 en la Ciudad de París Francia se estableciera el primer Congreso Obrero Socialista donde se estableció aquellas condiciones exigidas en la huelga de Chicago del año 1886, estableciendo al 1° de mayo como fecha Internacional del trabajador, casi un siglo después se constituye la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en el año de 1919. Para nuestro país este día fue celebrado a partir del año 1913 y plasmado en nuestra Carta Magna de 1917, con el artículo 123 constitucional, garantizando las condiciones laborales que deben existir en nuestro país. Un avance significativo para la clase obrera, dignificando el trabajo, el salario y las horas laborales, contemplando las condiciones de salubridad y de oportunidad para el trabajador, regulando así sus derechos y beneficios correspondientes.

Contemplar esta fecha como día de lucha, de manifestación ante aquellos atropellos a la clase obrera, hacer honor a lo que representa este día importante para el trabajador, pues siendo pleno siglo veintiuno y con leyes en pro de la clase obrera, aún no se cuentan con las mismas oportunidades, siguen siendo equívocas e ineficientes para los trabajadores, donde no se perciben un salario justo, donde existe la explotación laboral, la explotación infantil, el acoso hacia las mujeres en su lugar de trabajo, pese a estar plasmado en las leyes son factores que abundan en las empresas sin olvidar el campo que es uno de los sectores olvidado y con condiciones de  vulnerabilidad para los trabajadores.

 Pareciera que después de casi un siglo y medio desde aquel estallamiento de huelga, solo se tenga la garantía de un horario laboral, condiciones de trabajo y la garantía de un salario, se debe exigir una mejor dignificación y oportunidad laboral en las empresas, ambientes  libres de explotación y acosos, donde no se permita la impunidad donde impere el desarrollo de las cualidades y aptitudes de cada ser humano sanamente, olvidar que somos maquinas fehacientes de producción y consumismo,  luchemos por una verdadera dignificación del trabajo, donde aquellas garantías plasmadas en la Constitución sean cumplidas, que toda aquella ley en favor de la clase obrera se cumpla, marchemos por unidad y convicción de que el trabajo mejorare, que aquellas empresas extranjeras y nacionales dignifiquen al trabajador, donde al trabajador del campo se le reconozcan sus derechos garantizando sus condiciones laborales y obteniendo prestaciones que mejoren su calidad de vida, marchemos por que todo se cumpla, por la igualdad, la equidad y la justicia laboral se aplique en todos los sentidos como debe de anteponerse.

Celebremos el 1° de mayo como trabajadores, hagamos homenaje a quienes nos dieron el ejemplo de alzar la voz, de aquellos que cansados de tanto atropello lograron dignificar a sus compañeros, “EL PUEBLO UNIDO JAMAS SERA VENCIDO”, y México debe ser reconocido como un país que propicie las mejores condiciones de trabajo para las personas, ser modelo a seguir y no estar en la situación actual, que a pesar de que todas estas peticiones se contemplan en la máxima ley de la nación, se queda solo en teoría, en la práctica seguimos un siglo atrás.

*Mildred Silva es criminóloga, además de ser militante y fundadora de Morena