El Despertador: El dilema de las energías

Por Oscar Donato

¿Quién podría negar que las energías renovables son y deben ser el futuro? De lo que se puede observar, todo se está encaminando para que en el mundo se implementen las herramientas necesarias para llegar a ellas. Sin embargo, por mucho que se desee, faltan algunos años para implementarlas por completo. Como antes se hizo para la aprobación de la reforma energética, en México, la oposición utiliza esa tendencia para lucrar, hacer demagogia y polarizar a la sociedad señalando que el gobierno de la —4T.— está en contra de las energías limpias o renovables. Los sofismas y mentiras son un recurso muy arraigado en esos que lo vendieron todo. Señalan que la inversión en las refinerías es regresar al pasado, como si los mexicanos no tuviéramos memoria. Si el pasado significa en tiempos de Lázaro Cárdenas, ojalá se pudiera. Piensan que nos olvidamos de Salinas a Peña Nieto: privatización de la banca, la masacre de Acteal, de Aguas Blancas, la deuda del fobaproa, de la influenza, la guerra contra el narco, Ayotzinapa, la mal llamada reforma energética y todas las privatizaciones que se derivaron e intentaron.

Su desesperación es tan grande que sin una gota de… ética, anuncian que irán juntos a las próximas elecciones del 2021. ¡Cuánta razón tenía el presidente —Andrés Manuel— cuando decía que eran lo mismo y no un contrapeso para la democracia! El PRIANPRDMC, llamado el TUMOR de México, gasta millones en comerciales de radio y televisión para manipular y convencer a los mexicanos para que volvamos a votar por ellos.

Ahora, al igual que antes, intentan vendernos la misma idea con la que robaron y nos engañaron a todos los mexicanos. La privatización es lo mejor para México señalan… “qué le importa a la gente si CFE produce la energía o un privado”, dice la senadora panista Xóchilt Gálvez. No quieren darse cuenta que es por ello, que los mexicanos votamos por un cambio, que sí nos interesa conservar nuestros recursos naturales como toda nación independiente. Conservar la autonomía de los recursos esenciales como la energía, el agua, la salud, la educación y sus alimentos. Es incluso por seguridad nacional mantener una independencia como Estado soberano. El no depender de otras naciones, evita que pueda usarse como medida de coacción si no atendemos sus intereses. ¿Qué podríamos hacer si dependiéramos en todo de otras naciones y deciden no facilitarnos los recursos? Un claro ejemplo de ello, es el decreto que firmó el expresidente Donald Trump, para que el laboratorio estadounidense Pfizer no distribuya la vacuna del Covid-19 a otros países. Que de preferencia a los ciudadanos norteamericanos con su conocido eslogan: “América first” ¿Dónde quedan los tratados internacionales del libre comercio? La realidad nos muestra que los países en estado de emergencia siempre apostarán por sus propios intereses.

El progreso para la derecha mexicana es regalar el futuro de los jóvenes, de las nuevas generaciones de por sí ya olvidadas, como si no hubiese sido suficiente. Mientras que aquí en el país, los detractores critican al presidente Andrés Manuel López Obrador, por hacer una refinería y rescatar a otras que los gobiernos anteriores abandonaron. Al mismo tiempo, cierran la boca para no mencionar que tan sólo en el 2020, se aprobaron las inversiones en el mundo de: 2 refinerías en los Estados Unidos de Norteamérica, 1 en Canadá, otra más en China, Rusia, 2 en Australia, Irán… sólo por señalar algunas. 10 o más refinerías se construirán en el mundo en los próximos años. ¿Acaso también esos presidentes están en el pasado o, están conscientes de que sus ciudadanos necesitan todavía de la energía del petróleo para cumplir la demanda, mientras se sigue avanzando con las energías renovables?

¿Quién no desea tener un auto eléctrico que además de no contaminar, no use gasolina? ¿Cuántos mexicanos se lo pueden comprar hoy en día? Todos queremos una ciudad limpia. Pero esos mismos inversionistas que exigen al gobierno mexicano que no invierta en refinerías, siguen contaminando el país con las fábricas nacionales y extranjeras. Reclaman que se dé prioridad a la inversión extrajera de energías renovables. ¿No resulta una hipocresía cuando en sus países se están construyendo refinerías? Es de mencionar que muchos países no cuentan con petróleo, sin embargo, lo siguen comprando. ¿Por qué no dejan de hacerlo e invierten en energías renovables? Las empresas privadas jamás verán el interés de los ciudadanos, buscan su utilidad, su ganancia; pues para ello nacieron.

México está abierto al mundo, pese a que sus detractores digan lo contrario de este gobierno. Lo podemos ver con las gestiones que se han hecho con tantos países para importar la vacuna: Estados Unidos, Inglaterra, Rusia y China. Confunden apertura con saqueo.

Por fortuna, son más los mexicanos que han despertado, que vuelven a tener un poco de esperanza al ver que se intenta rescatar a todo lo que hace grande a un país, lo que admiramos de otras naciones gracias a su “autonomía”.

Las energía renovables llegarán, de eso no hay duda, mientras tanto, aprovechemos nuestros recursos naturales para salir de atraso en que esos —vende patria— nos dejaron.