Cárdenas, un hombre que amaba bosques y montañas, en memoria de los 50 años de fallecido

Por Jesús Jiménez

Columna: Textos al Minuto

Aunque no se encuentre en Colima en su mayor dimensión geográfica, lleva el nombre de nuestro querido estado, no por razones de ego regional, sino por evolución de la historia de las delimitaciones territoriales; y tiene su mérito el hecho de que el 5 de septiembre de 1936, el general presidente revolucionario, Lazaro Cardenas Del Rio, decretó como Parque Nacional el Nevado de Colima, y este Decreto se extendió a nuestro grandioso Cerro Grande.

¿Por qué amaba don Lazaro Cardenas las grandes montañas y zonas boscosas del paìs? Porque fue educado, recibió enseñanzas para amar a los arboles, las montañas y serranías boscosas.

En sus Apuntes- texto fundamental para entender su vida y obra por él mismo narrada- señala y reconoce a su maestro Hilario de Jesús Fajardo:

“En todas las excursiones, la plática amena de nuestro maestro, nos hacía conocer la obra de la Naturaleza, de su importancia y el cariño que debíamos guardarle. Es el árbol, nos decía, el mejor amigo de los niños, los cobija con su sombra, da salud y frutos y en general enriquece a los países”.

El general Cardenas, cuando anduvo en la Revolución, luego cuando fue candidato, recorrió en bestia, barcazas, avionetas y hasta caminando, prácticamente sin dejar de visitar región o punto alguno del país: lo peinó de pe a pa.

En 1934, sobrevoló la Sierra de Durango y consignó: “Sigue el lomerío cubierto de bosques de pino y encino. Bosque poco ralo que precisa evitar la tala por siglos mientras enriquecen las tierras. Estos montes han crecido en el transcurso de los siglos y se han conservado debido a la ninguna población y ausencia de ganados que facilitaron su crecimiento cuando empezó a brotar el monte”.

Del hermoso cerro michoacano de “Tancítaro, cerro el más elevado de Michoacán, que alcanza una altura de. 3 800 metros sobre el nivel del mar. Hermoso cerro boscoso cubierto de coníferas que en algunos inviernos llega a cubrirse de nieve”.

4 años antes de su muerte, en 1966, el general Cardenas viajó al heroico punto de la insurgencia campesina-magisterial en.la sierra de Chihuahua, describiendo así la zona: “Madera fue bien trazada en sus calles. Su aspecto es atractivo, los bosques que la rodean, a pesar de estar ya muy talados, le dan belleza al conjunto. Ojalá que el vecindario sepa conservar su arbolado”.

Al hacer el recuento de la tragedia y de los agravios en Madera, el general Cárdenas se preguntó y se contestó a sí mismo ¿qué empresa maderera ha dejado huella benéfica en las zonas boscosas que ha explotado? ¿Quién se acuerda de reclamar responsabilidades de talas inmoderadas, adeudos, falta de cumplimiento de construcción de obras, como vías férreas, caminos, hospitales, fábricas de productos madereros que debieron cubrir las empresas que explotaron montes hace 50 años? ¿Tienen esperanza los afectados de que una vez los cumplan? Ninguna. En cambio, la existencia del Estado es permanente, y si al explotar los bosques de las comunidades no se les entregan las utilidades que les corresponden, queda el recurso a las comunidades de pedir al Estado obras que le beneficien. Pero los explotadores de la riqueza forestal no devolverán la parte que indebidamente se han llevado”.

El historiador y paisano del general Cárdenas, don Luis Gonzales y González, citó al periodista y escritor apreciado también, Fernando Benitez, colaborador cercano del presidente, quien refirió que Cardenas “amaba los caballos, las plantas y el agua; montaba sin alardes, cuidada sus flores y casi diario nadaba en la alberca de Los Pinos”. Aquí recuerda quien esto escribe, haber leído que cuando firmó el Decreto de la expropiación petrolera se fue a bañar al Nevado de Toluca. ¡Que templanza de patriota!

En su obra Los Días del presidente Cardenas, este mismo historiador, cita que en una ocasión el general visitó “los bosques de Ocotlán, que pertenecen a 18 pueblos, y suspendí allí mismo tala inmoderada de los bosques, las explotaciones que tiene Agustín Riva Palacio”.

Este textito lo escribí al minuto, tomando algunas fichas que guardaban en mi anaquel, esperando salieran a ser de utilidad, lo que en esta coyuntura del medio siglo de fallecido tan ilustre presidente y patriota, saco a colación. Y. Ojalá que el actual presidente, Andres Manuel López Obrador, quien encabezó hoy 19 de octubre un digno reconocimiento del General Cardenas; un día nos regale al pueblo ccolimense un Decreto de rescate del mal uso y la apropiación por algunos privilegiados del viejo régimen de la corrupcion, de la Laguna de Cuyutlan y de las del resto de la entidad, incluida la del Jabalí, El Epazote, que gozan unos cuantos, gracias a relaciones de poder con familias de notables de dicho viejo sistema.